

El resultado de estos experimentos es el centro de “Bajo control”, la nueva serie que se emitirá en National Geographic Channel todos los martes a las 23.30 horas, a partir del 16 de diciembre. Daniel Pink nos mostrará cómo conseguir que la gente respete los límites de velocidad, que los peatones respeten los semáforos en rojo y crucen sólo cuando deben para no poner en riesgo su vida o incluso conseguirá que la gente se anime a subir escaleras simplemente convirtiéndolas en un divertido instrumento musical.
Episodios que se emitirán en diciembre


“Bajo control: Infractores”
Martes 16 de diciembre a las 23.30 horas
Millones de nosotros infringimos la ley a diario al conducir demasiado rápido, y aún así, los montones de multas por exceso de velocidad no parecen servir para nada. Cada año mueren trece mil personas en las carreteras estadounidenses por culpa del exceso de velocidad, y Daniel Pink, experto en modificación de conducta, cree que ya es hora de aplicar un enfoque radicalmente nuevo.
“Bajo control: Un país perezoso”
Martes 23 de diciembre a las 23.30 horas
Millones de turistas visitan cada año el Barrio Francés de Nueva Orléans, para disfrutar de un buen rato y una buena comida. Es uno de los pocos lugares de los Estados Unidos en los que está permitido beber en la calle, pero esto conlleva un problema: cada noche, sus famosas calles quedan abarrotadas de toneladas de basura, ya que la gente tira latas, vasos y botellas. Hay papeleras por todas partes, ¿acaso la gente es tan vaga que ni se molesta en utilizarlas? El plan de Daniel Pink es conseguir que los juerguistas se conviertan en barrenderos voluntarios mediante una papelera-concurso. ¿Lo conseguirá?
“Bajo control: Trucos de viaje”
Martes 30 de diciembre a las 23.30 horas
Daniel Pink, experto en modificación de conducta, está decidido a que volvamos a divertirnos viajando, y quiere empezar por conseguir que la charla de seguridad del avión vuelva a resultarnos interesante, que la recogida de equipajes sea más fácil y que no nos frustremos intentando encontrar nuestro coche en el parking del aeropuerto. Su método tiene que ver con un perro robot parlante, el olor del salvaje oeste, luces navideñas y un simulador de vuelo de 19 millones de dólares.